Recepción del vehículo y consulta sobre problemas detectados.

Inspección inicial para evaluar el estado general.

Diagnóstico con herramientas especializadas de última tecnología.

Revisión detallada de motor, frenos y suspensión.

Reparación o mantenimiento según diagnóstico y necesidades.

Uso de repuestos originales para mayor durabilidad.

Pruebas de funcionamiento y ajuste final.

Entrega del vehículo con recomendaciones personalizadas.

Inspección del nivel y estado del aceite actual.

Drenado del aceite usado y cambio de filtro.

Relleno con aceite nuevo de alta calidad.

Revisión final y prueba de funcionamiento del motor.

Inspección inicial del sistema de frenos y sus componentes.

Revisión del desgaste en pastillas y discos de freno.

Verificación del nivel y calidad del líquido.

Limpieza de componentes y eliminación de residuos acumulados.

Reemplazo de piezas desgastadas con repuestos originales.

Ajuste y calibración del sistema para mejor rendimiento.

Prueba de frenado para verificar funcionamiento óptimo.

Entrega del vehículo con recomendaciones de mantenimiento preventivo.

Conexión del scanner para lectura de códigos de error.

Inspección visual y pruebas en sistemas principales.

Análisis de datos para identificar posibles fallas ocultas.

Revisión y ajuste de componentes según diagnóstico.

Entrega de informe detallado con recomendaciones de mantenimiento.

Inspección visual de motor, frenos, suspensión y transmisión.

Diagnóstico electrónico para detectar fallas ocultas.

Revisión de niveles de fluidos y estado general.

Ajuste y mantenimiento según necesidades del vehículo.

Entrega con informe y recomendaciones de mantenimiento preventivo.

Inspección completa de carrocería, motor y sistemas mecánicos.

Diagnóstico electrónico para detectar fallas no visibles.

Evaluación de suspensión, frenos y transmisión del vehículo.

Verificación de historial y estado legal del automóvil.

Entrega de informe detallado con recomendaciones técnicas.